Los medios de comunicación masiva se han desarrollado con una fuerza impresionante desde la segunda mitad del siglo pasado y han contribuido con la evolución de la civilización humana, haciendo cada vez más cortos los conceptos de lugares lejanos en nuestro planeta, así como la comprensión actualizada del acontecer mundial que antes sólo llegaba de una manera atrasada y fuera de contexto, porque ya no embonaba la realidad de cada parte del mundo con el tiempo en que se vivía y era desdeñada todas esas realidades del mundo fuera del contexto local. Esto daba una visión recortada de un mundo lleno de información valiosa que se iba perdiendo con el enemigo inexorable del tiempo.
La educación de igual manera se mantenía estatizada con las cortas realidades locales y con la cotidianidad que ofrecía no hacer cambios en la visión de la educación porque comenzaba a plantear problemas para lo cual la escuela y los maestros no estaban preparados ni dispuestos para entrar en una dimensión de un conocimiento más holístico y universal, pues las personas y sus actividades locales no lo requería y en cambio se descontrolaban con el sólo pensar en realidades paralelas del mundo fuera de su contexto cómodo e ideal, que daba solidez a su vida afable sobre la búsqueda de los cambios que la sociedad no apreciaba y le incomodaba a su vida común.
Los medios de comunicación han sido evaluados y usados por los grupos de poder, porque estaban conscientes primero que nadie en la humanidad, de la riqueza pedagógica que representaban, por su impacto, novedad y repetición. Por lo cual han sido satanizados de manipuladores durante mucho tiempo, sin embargo sus cualidades poderosas de difusión educativa han sido omitidas durante mucho tiempo por los ámbitos educativos tradicionales, los cuales siguen predicando la sabiduría única de los maestros como vacas sagradas del conocimiento.
No podemos concebir el mundo actual, sin las ventajas tecnológicas que nos brindan los medios de comunicación, que ya tienen un lugar preponderante en todos los niveles económicos de la sociedad, donde no sólo los medios más antiguos como el radio y la televisión están al alcance de toda la población económicamente activa, sino la tecnología de punta basada en la Internet de banda ancha en computadoras y en teléfonos que pueden estar a la venta hasta en un mercado de legumbres o en una tienda de conveniencia a la vuelta de la esquina.
El dilema es que como se puede desperdiciar en la educación el poder de penetración de los medios antes mencionados para poder responder a una educación exigente y extramuros, que tiene la posibilidad de entregar conocimientos de todo tipo las 24 horas del día sin que sea aprovechado de una manera más metodológica y consciente para poder aprender y humanizarse.
Muchas veces han divagado conceptos vagos y a veces a mi manera de ver mal fundamentados, en cuanto a que los medios de información deshumanizan, sin embargo no podemos olvidar la hermandad que nos confiere un acontecimiento presenciado en cualquier parte del mundo por medio de la televisión y transmitido a todo el planeta, como la misión espacial Apolo 11 que llegó supuestamente a la luna, las olimpiada de cada cuatro años, las tragedias naturales que nos hacen ser solidarios con personas e idiosincrasias totalmente ajenas a nuestras culturas. Entonces nos preguntamos si en realidad estos acontecimientos nos hacen más consientes de nuestra humanidad, de nuestro único hogar que es la tierra y que a veces compartimos de una manera inconsciente.
Los signos y lenguajes que manejan actualmente los jóvenes en las redes sociales virtuales y que se reflejan en sus conceptos diarios, ¿No podrían ser utilizados para poder hacer una educación más profunda y humana?
Nos encontramos en la coordenada donde el tiempo y el espacio representan una serie de problemáticas que nuca había vivido la sociedad, problemas económicos que no son solventados por la educación tradicional, problemas sociales y ecológicos que no fueron planteados en una licenciatura y en toda una historia académica, porque era más importante mantener la apariencia de la tradición y la pseudodisciplina que crear una educación efectiva para los problemas reales, creando soluciones reales.
En conclusión los medios de comunicación masiva para mi modo de ver son fundamentales para la educación, no del futuro, sino la de hoy, que no enfrenta la conciencia de la realidad y sigue tratando de subsistir con los medios pedagógicos del pasado.
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